Miel de caña para el dolor menstrual

La miel de caña o melazas es un subproducto de la transformación de la caña en azúcar. Se utilizan fundamentalmente en alimentación animal por su gran valor nutricional y bajo precio, pero también se destinan a alimentación humana.
Se pueden encontrar en algunos supermercados, aunque es difícil, junto a la miel de abeja. Se presentan en un formato de líquido espeso, color negruzco y sabor ligeramente amargo.
Hace un año buscando remedios naturales para aliviar el dolor menstrual me encontré con un vídeo en Youtube de una muchacha que aseguraba la miel de caña le había ayudado enormemente.

Tras verlo decidí investigar un poco sobre las melazas y ver si realmente podrían ayudar con los cólicos y dolores menstruales. Si bien no encontré ningún documento científico que certifique que la miel de caña alivia el dolor menstrual encontré bastante información sobre su composición nutricional.

La miel de caña es rica en hierro. Las reglas intensas pueden causar deficiencia de hierro, con lo cual aunque no ayude con el dolor menstrual ayuda a contrarrestar otro efecto negativo de la menstruación. Además de su alto contenido en hierro tiene también grandes cantidades de vitaminas del grupo B y un precursor del ácido fólico que estimulan la producción de eritrocitos. 

Es también muy rica en magnesio. Una deficiencia de magnesio puede provocar espasmos musculares, y como el útero es un músculo si se contrae bruscamente puede causar dolor. Gracias al aporte extra de magnesio estos espasmos se podrían reducir o eliminar. 

La miel de caña contiene niveles elevados de potasio. El potasio ayuda a mantener los músculos tonificados, siendo el útero un músculo ayudaría a "mantenerlo en forma". 

Mi experiencia personal con la miel de azúcar de caña 

Tras ver ese vídeo en Youtube y leer unos cuantos artículos sobre las melazas decidí probarlas para ver si así se reducían mis (horribles) dolores menstruales del primer día.

Estuve tomando una cucharada colmada de miel de caña  a diario durante 7 meses. Para tomar solas me resultaban un poco amargas sin embargo me gustaba mucho el sabor que le daban a las infusiones, especialmente a aquellas de frutos rojos. Dada mi gran afición a las infusiones no me fue difícil tomar mi "dosis" diaria de melazas. 

Aunque finalmente encontrase una forma agradable en la que tomar las melazas los resultados no fueron los esperados. Mis dolores menstruales no desaparecieron, ni tan siquiera se vieron reducidos, tras siete meses consecutivos tomándolas. 

Por mi experiencia personal no la recomendaría sin embargo hay otras muchas mujeres a las que les ha ido muy bien y creo que merece la pena probar si en vuestro caso funcionan. El bote de la foto cuesta un poco más de 2€ y dura aproximadamente un mes si se toma una cucharada al día, resultando por lo tanto un experimento muy económico.