Con las desechables solo existe la opción de blanco nuclear, sin embargo con las de tela podemos tenerlas de cualquier color y lisas o estampadas. Al probar las de tela muchas se decantan por las blancas porque les recuerdan a las desechables, mientras que otras mujeres prefieren las negras o de colores oscuros por miedo a las manchas.
En esta entrada vamos a ver los pros y los contras de cada uno de ellos.
Compresas blancas o de colores claros
Personalmente son mis preferidas porque me parecen más alegres y sobre todo porque me permiten controlar mi flujo mucho mejor que las que son más oscuras.
Ventajas:
- Recuerdo a las desechables: para muchas esto puede parecer banal pero para áquellas que se están introduciendo en el mundo de las compresas lavables que una compresa sea totalmente blanca puede influir positivamente.
- Posibilidad de ver nuestro patrón de sangrado: con las compresas blancas o claritas es mucho más fácil saber cuanto hemos sangrado y como se ha distribuído este flujo. Esto es importante en el caso de que necesitemos monitorizar nuestro sangrado debido a algún problema ginecológico o en los primeros días postparto, cuando las enfermeras controlan la cantidad de sangre producida.
- Facilidad de lavado: si bien es cierto que con las compresas más oscuras las manchas de sangre son menos visibles con las que son blancas o de colores claros podemos usar blanqueantes como el agua oxigenada, el percarbonato de sodio o incluso ponerlas al clareo sin tener que preocuparnos demasiado de que se produzca algún desteñido o los colores se desvanezcan.
- Naturalidad y ecología: si escojemos compresas de colores naturales, vamos de telas que no hayan sido ni blanqueadas ni teñidas reduciremos nuestro impacto en el medio pues estamos eliminando un proceso en el que hay muchos productos químicos involucrados.
Desventajas:
- Tendencia a mancharse: las manchas de sangre son mucho más visibles en las compresas claritas que en las oscuras, aunque con una buena rutina de lavado las manchas se pueden evitar. Hay además tejidos sintéticos que son resistentes a las manchas como la antelina, el minky o el micropolar.
Aquí están parte de mis compresas claras o sin teñir, como véis ninguna tiene manchas a pesar de que mi rutina de lavado es más bien simple: enjuagar, agua oxigenada si veo alguna mancha feota y lavadora.
Compresas negras o de colores oscuros
A mí, personalmente, no me gustan mucho porque no veo lo que sangro pero aún así tienen sus ventajas.
Ventajas:
- No se manchan: bueno, sí se manchan pero las manchas no se ven con tanta facilidad porque los colores oscuros las camuflan.
Desventajas:
- Desteñidos: tratar colores vibrantes u oscuros con algún quitamanchas a base de oxígeno activo o ponerlos al clareo puede hacer que los colores se desvanezcan. Además el propio flujo vaginal de la mujer (que es ácido) puede hacer que los colores oscuros destiñan, a mí esto no me ha pasado con ninguna compresa pero sí con alguna que otra braga (foto).
- Alergias y contaminación: aunque las alegias a los tintes son poco comunes las menciono porque también es normal que muchas de las mujeres que se pasan a las compresas de tela lo hagan por razones de hipersensibilidad. Las telas negras y de colores oscuros llevan PPD (parafenilenodiamina) para fijar el color y puede causar alergia a algunas personas además de ser un contaminante ambiental.
Y para terminar...
Por mi experiencia personal y la compartida con otras usuarias de compresas lavables en foros he llegado a la conclusión de que si ver nuestra compresa manchada es algo que nos preocupe las compresas con estmpados marmolizados son las mejores. Dado que mezclan varios colores se disimulan muy bien tanto las manchas de sangre como las manchas de desteñido.
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